¿Cuándo y quién puede consultar?

¿Cuándo y quién puede consultar?

Es posible que necesite sembrar a un podólogo para tratar el dolor (por ejemplo, una uña encarnada) o para tratar sus causas (por ejemplo, un pie plano).

El cuerpo se compone de una multitud de segmentos que forman uno. No te preocupes, el podólogo se encarga del tratamiento del dolor, pero también de la causa de este dolor para una comodidad duradera. Por lo tanto, es posible que necesites ver a un podólogo para tratar el dolor directamente en el pie o en otro lugar, pero causado por él.

¿Por qué consultar?

Quiropodia: trastornos de la piel y/o de las uñas:

  • Quiropodias clásicas
  • Uñas encarnadas o uñas dolorosas
  • Callos
  • Micosis (uñas o piel)
  • Verrugas
  • Hematomas bajo de las uñas
  • Pérdida parcial de uña
  • Ampollas a los pies

Ortésis

  • Deformidad del dedo del pie (Hallux valgus, garras de los dedos)
  • Superposición de los dedo (supraductus, infraductus)

Exploración biomecánica: Trastornos óseos, musculares y articulares del pie, extremidades inferiores y columna vertebral:

  • Dolores crónicos en el pie (dedos de los pies, planta del pie, talón, patada, apoteosis plantar)
  • Tendinitis
  • Periostitis
  • Fracturas
  • Dolores crónicos en las rodillas, las caderas, la espalda
  • Marcha anormal (pies hacia adentro, pies hacia afuera, pies planos, pies huecos, rodillas en X, rodillas arqueadas, etc.)
  • Enfermedades de crecimiento (Enfermedad de Sever, Osgood Sclatter, Renader, etc.)
  • Desigualdad en la longitud de las piernas

¿Quién puede consultar?

Todos:

Desde niños hasta antiguos, deportistas, diabéticos y personas con reumatismo.

De hecho, existen patologías específicas para grupos de edad, actividades deportivas o profesionales, así como enfermedades crónicas.